Sábado, 23 de Noviembre del 2024

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Liberan a Salvador , trabajador del IMSS; se lo llevaron «por error»

Fueron necesarias 5 horas de angustia, enojo, zozobra, indignación e impotencia, para que finalmente Salvador, trabajador del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) perteneciente al área de Pedriatría del Centro Médico de Occidente (CMO), tras estar incomunicado durante este tiempo, fuera liberado tras ser ingresado a la Fiscalía General de la República (FGR). Todo fue un «error».

Una vez dispersada la manifestación de cientos de trabajadores del IMSS, que se percataron de que Salvador fue detenido a la fuerza y desaparecido por varias horas, familiares así como la representación legal del sindicato de este instituto se desplazaron a diferentes corporaciones con el objetivo de tener noticias de él.

La primera parada se hizo en la puerta principal de la FGR, donde por cerca de 30 minutos nadie ofreció dato alguno a los abogados ni a la propia esposa del trabajador, confirmando que Salvador no estaba en esas instalaciones; la segunda parada fueron los separos municipales de Guadalajara, en donde también se informó que tampoco había llegado.

Conforme transcurría el tiempo los abogados hablaban en lenguaje legal sobre que el periodo que había transcurrido, desde su detención ilegal hasta el momento en que no había llegado a la FGR, ya daba cuenta de una desaparición forzada así como también de una privación ilegal de su libertad.

Nadie sabía en dónde estuvo Salvador las 5 horas posteriores a su detención. En un segundo intento, los abogados finalmente lograron entrevistarse con el fiscal de guardia de la dependencia Federal, quien de manera despectiva sencillamente argumentó que «no tenía datos y que él no lo había detenido». Luego se dió la vuelta y se fue.

Poco antes de las 1:30 de la madrugada, gracias a la presión social y a la viralización del caso, fuentes allegadas a la representación legal les informaron que Salvador recién había salido de la Cruz Roja con sede en el Parque Morelos, esposado y escoltado por varios uniformados de Protección Federal, fuente que también informó que se dirigían hacia las instalaciones de la Fiscalía Federal.

Minutos antes de las 2 de la madrugada un par de camionetas oficiales rotuladas bajo el nombre de Protección Federal arribaron hasta la puerta trasera de las instalaciones de la corporación, en donde para su sorpresa, ya estaba la esposa de Salvador así como sus abogados.

El trabajador del IMSS bajó atado con aros aprensores y resguardado por los uniformados. No hubo oportunidad de acercamiento con su familia ni con su representación legal; en un momento de oportunidad, Salvador únicamente gritó a su esposa y abogados: «fue él, el del pantalón café me golpeó». En cuestión de segundos se abrió la puerta trasera y fue ingresado para ponerlo a disposición de un agente del Ministerio Público.

Cerca de las 5:30 de la mañana finalmente Salvador fue liberado. Sin información, sin datos del delito que se le señala, y ante un silencio sepulcral por parte del propio IMSS, a quien Tráfico ZMG estuvo cuestionando para obtener un posicionamiento oficial desde poco después de las 3 de la tarde. La respuesta por parte del instituto en torno a los hechos registrados durante el mediodía y al caso de Salvador nunca llegó.

Lo que sí llegó es el temor por su integridad.

Abraham Maciel